jueves, 26 de abril de 2012

"El Señor de las moscas"- William Golding


1. El toque de caracola. (Pag. 9 a 31)

En el principio de esta parte de la historia, aparece un chico rubio de algo más de doce años y un niño gordito más chico. Los dos se encuentran en una isla, después de que su avión se incendiara y cayera. Los dos chicos se encuentran solos en una playa, sin adultos ni otros niños. El chico rubio, Ralph, aparenta tranquilidad y gozo respecto a la situación de no tener ningún adulto cerca. Además, no le preocupa buscar a otros niños por la isla y esta confiado de que su padre, un teniente de la marina, los va a rescatar. El chico gordito, Piggy, es todo lo contrario. No siente tanta calma, como Ralph, y esta preocupado por todos los otros niños que iban con ellos en el avión, trata de buscar una forma de encontrar a todos y reunirlos. Piggy, no esta tan seguro de que el padre de Ralph los pueda rescatar, ya que están en una isla sin poder comunicarse.
Ralph descubrió una plataforma de granito rosa, que en una parte se había formado una poza de agua caliente. Los dos chicos se metieron, pero Piggy no sabia nadar, así que se sentó en el lado de arena de la poza, mientras que Ralph buceaba y se movía de un lado al otro.
Al salir de la laguna, Piggy intenta retomar su idea de buscar a los otros niños, pero Ralph no lo escuchaba. En un momento, encuentran algo de color cremoso entre las algas de la laguna, era un caracol. Piggy recordó haber visto una igual en la casa de un amigo y estaba excitado pensando en el precio que tendría uno en Londres. Ralph logro sacar la caracola con una rama y su mano. El chico gordito tuvo la idea de utilizarla para llamar a los otros chicos, entonces, Ralph sopló varias veces por la caracola, hasta que entre las palmeras apareció un niño. Se llamaba Johnny, parecía tener unos seis años, era rubio y fuerte, tenía la cara manchada de fruta. Ralph, siguió soplando la caracola hasta que muchos otros niños empezaron a llegar hasta la plataforma. Había niños de todas la edades, que salían de todas partes con ropa de los uniforme, otros desnudos o medio desnudos. En el grupo de niños sentados frente a Ralph, había dos gemelos que respiraban y se reían al mismo tiempo, además su aspecto era exactamente el mismo, se llamaban Sam y Eric
Ralph, una vez que dejó de soplar la caracola,  pudo observar que en la playa tres sombras negras. A medida que se acercaban a la plataforma, se dio cuenta de que eran un grupo niños vestidos de negro, que caminaban a compás. Eran un coro liderado por Merridew. Ellos se acercaron pensando que había un barco. Uno de los chicos del coro se desmayo y Marridew dio la orden de que le dejaran y se sentaran, ya que siempre se desmayaba. Preguntó a Ralph si no había gente mayor, y este le dijo que no. Piggy, no les preguntó sus nombres, ya que se sentía intimidado por la superioridad que tenían.
Merridew, propuso la idea de que todos se tenían que cuidar unos a otros. Piggy le comento que esa era la razón de que Ralph los llamara y sobre los nombres de todos los chicos. Jack Merridew lo hizo callar y lo llamó “Fatty”. Ralph le gritó que no se llamaba así y su nombre era Piggy. Todos rieron de Piggy.
Ralph propuso la idea de que deberían tener un jefe. Jack con arrogancia dijo que el debería serlo porque es el primero en el coro de la iglesia. Roger, un muchacho moreno, dijo que era mejor hacerlo por votación. Los chicos del coro votaron a Jack, y el resto de los otros niños votaron por Ralph, incluso Piggy levantó la mano a regañadientes. Ralph se convirtió en jefe y le propuso a Jack, que el siguiera al mando del coro y que podían ser los cazadores del grupo. jack, le comentó a ralph sobre su plan de escalar la colina para ver si estaban en una isla, pero no lo pudo hacer porque escucho el llamada de la caracola. Ralph, decidió ir a escalar esa colina con Jack y Simon.
Piggy también quería ir, pero Ralph y Jack, le dijeron que el no servía para ese tipo de trabajo. Ralph, Jack y Simon bajaron de la plataforma y empezaron a caminar hacia la colina. Ralph paró un momento y se acerco a Piggy diciéndole que no podía acompañarlos, Piggy le contestó que no le gustó que les dijera a todos como se llamaba, después de que le pidiera que no lo hiciera. Ralph lo intentó convencer de que Piggy era mejor que “Fatty” y que mejor fuera a seguir con su trabajo de tomar los nombres del resto.
Ralph, Jack y Simon caminaron por la playa, mientras reían. Querían llegar al extremo de la isla y ver de allí lo que había al otro lado. Al caer la noche, divisaron el final de la isla sin ningún efecto mágica que ocultara su aspecto. Hallaron  muchas formas cuadradas que les resultaban familiares y un gran bloque en medio de la laguna, donde las gaviotas ponían sus nidos.



Personajes

Ralph: Un chico rubio de mas de doce años. Dejo de tener el cuerpo de un niño, pero aún no tenía el de un adolescente. Por la anchura de sus hombros y su espalda, podía ser boxeador, pero en su rostro no reflejaba tener un demonio escondido. Se muestra indiferente y despreocupado. Resalta entre todos por su aire de serenidad, su estatura y atractivo.

Piggy: Un chico gordito y asmático de anteojos. Se muestra algo preocupado por no tener adultos cerca, ya que su tía era muy sobre protectora con el. Tiene gran paciencia y buenas ideas. También se lo muestra inteligente y observador.

Jack: Un chico de pelo rojo, pecas y ojos azules. Se lo veía alto y delgado. Su cara era fea pero no la de un tonto. Es el primero en el coro de la iglesia y tenor. Se muestra arrogante, mandón y patán. Es el que tiene mas condiciones de jefe.

Simon: Es un chico del coro. Era delgaducho y vivaz, con una mirada que emergía de una pantalla de pelo negro, lacio y tosco. Es propenso a desmayarse.

Roger: Es un chico del coro. Un chico moreno, menudo y furtivo. Estaba encerrado en si mismo hasta lo mas profundo de su ser.

Maurice: Es un chico del coro. Le sigue en estatura a Jack, era ancho de espalda y tenía una sonrisa permanente.

Sam y Eric: Mellizos. Tenían aspecto vivo y cuerpo rechoncho. Respiraban y reían a la vez

Johnny: Un niño de unos seis años. Rubio y fuerte.

Bill, Robert, Harold y Henry: Son parte del coro.

Todo me recuerda a ti- Sandra Mihanovich



Todo me recuerda a tí,
Tu sombra sigue aquí.
Cada paso que doy,
Cada historia de amor,
Todo, todo me recuerda a ti 


Cuando me dicen
Que tal les va
Como explicarles
Que ya no sé ni dónde estas.

Por que me tienen
Que hablar de tí,
Como decirles
Que te quiero olvidar.

Todo me recuerda a tí,
Tu sombra sigue aquí.
Cada paso que doy,
Cada historia de amor,
Todo, todo me recuerda a tí.

Tú me enseñaste
A comprender y aceptar
Que de amor nadie muere,
Que es fácil olvidar.

Por eso quise
Refugiarme en él
Pero cierro los ojos
Y te siento en su piel.

Todo me recuerda a tí,
Tu sombra sigue aquí.
Cada paso que doy,
Cada historia de amor,
Todo, todo me recuerda a tí.

Jamás te perdonaré
Que no pueda
Arrancarte de mí.
Jamás te perdonaré
Que no pueda volver a sentir.

Todo me recuerda a tí,
Tu sombra sigue aquí.
Cada paso que doy,
Cada historia de amor,
Todo, todo me recuerda a ti 

Cada paso que doy
Cada historia de amor
Incluso el aire huele a ti.


lunes, 16 de abril de 2012

Mi alma esta lista para una gran misión, resistir.


¿Para que resistir?

Resistir para encontrarse con uno mismo o solo para sobrevivir. 
Resistir es lo unico que nos queda cuando ya no nos queda nada. 
Resistir con tu alma, con tus ojos, con tu corazón, con tus manos, con tu cuerpo. 
Resistir con los pies en la Tierra y los ojos mirando al cielo.

lunes, 2 de abril de 2012

Desafortunado accidente que volvió a Penélope Cruz una Cenicienta


    Los paparazzi de Hollywood estuvieron en el momento y lugar indicado para generar una gran polémica. La glamorosa alfombra roja de los premios Oscar fue el escenario de la humillación de una de las actrices de “Bandidas”, Penélope Cruz. Aunque intentará reírse y poner buena cara, en el fondo no lo hará, y recordará esa noche como un momento oscuro y humillante en su carrera.
   Para las mujeres que crean que un “Dolce & Gabanna” será su mejor amigo, lo tendrían que pensar dos veces, porque la vida está llena de amigos que se van. Y Penélope Cruz lo descubrió de la peor manera, mientras bajaba de su limusina con su vestido negro hasta el suelo, sus zapatos plateados de taco alto y adornando todo su conjunto unos carísimos aros de diamante haciendo juego con un collar.
   Todos esperaban eufóricos la llegada de la actriz a la alfombra roja de los premios de La Academia. Había aproximadamente unos diez mil paparazzies. El cielo estaba alumbrado por flashes de cámaras como se ilumina en año nuevo por fuegos artificiales. La esperadísima actriz llegó. Todos se dieron vuelta a verla bajar de su coche. Mientras Penélope bajaba del auto su secretaria personal cerró la puerta sin darse cuenta de que una parte del vestido habría quedado adentro. La actriz dio un paso y quedó como un lienzo en blanco.
   “Los diamantes son los mejores amigos de una chica”, pensó seguramente al darse cuenta de que lo único que le quedaba de su vestuario eran los zapatos y sus diamantes. Miles de reporteros salieron, como animales salvajes, en busca de su presa, a hablar con ella y su secretaria. “No me di cuenta de su vestido”, dijo su secretaria preocupada y con temor de perder su trabajo
    Su ropa interior fue el atractivo de la noche. La hermosa actriz en lugar de refugiarse en su limusina nuevamente hasta arreglar el inconveniente, desfilo por la alfombra roja con su mejor andar de alta costura y lució su delicado conjunto de ropa interior. Seguida su asistente que, con la vista en el suelo se mostraba apenada por su error.
   “Se vio fantástica y supo manejar al situación”, dijo una conductora de un programa de moda. Todos admiraron a la actriz y pensaron que era valiente como un soldado en guerra.
   Finalmente, Penélope Cruz pudo lucir su “Dolce & Gabanna” en la ceremonia de premiación, cuando ganó el premio a la “Mejor Película de animación” por el “Gato con Botas”. Seguramente se sintió como en el cuento de Cenicienta quien pasa del vestido glamoroso a los harapos, y de los harapos al vestido glamoroso nuevamente.